24 de noviembre de 2007

Ausencia con ecos de silencio




Ausencia, con ecos de silencio

Es la distancia, donde te me pierdes,
cuando te busca, con ansias por ti,
mi pensamiento.

Es tu recuerdo que me trae
en brisas frescas el viento,
convertido en ecos de ausencia
llenos de silencio.

Y en la distancia, aguardo por ti.
Esperando que llegues a mi vida,
como llega el azul del cielo.
La sombra y la luz,
combinada en la floresta.
La brisa que me besa.

Y convierto en ilusión
la desesperanza,
al pensar en un día,
romper la distancia.

Soñando con encuentros,
con tu mirada,
con tus labios en un beso.
Con tus manos,
para tomarlas como pájaros sin nido,
y acunarlas con dulzura,
aquí, en mi pecho.
Es cuando la distancia no me duele,
pues se transforma en sueños,
y el azul del cielo, se vuelve más cierto,
y es la brisa, como tus besos.

Y es tu mirada, el ancho horizonte,
donde descansan mis ojos
y te acarician en silencio.
Derechos reservados

1 comentario:

Oscar Néstor dijo...

La distancia cruel separa pero no nos deja olvidar, si hay firmeza de sentimientos.
Preciosas letras Marina.